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La celebración de un evento deportivo como un Mundial de fútbol anima a las empresas a aumentar sus inversiones publicitarias. Ya sean o no sponsors oficiales del campeonato, los anunciantes no dudan en querer formar parte de la cita deportiva más importante del año. Sin embargo, el riesgo que se corre al querer asociar una marca a un acontecimiento así es evidente: el éxito o el fracaso está en manos de terceros. Esto, para un anunciante, puede ser muy peligroso.

publicidad mundial brasil

Las marcas españolas que han hecho de “La Roja” el centro de sus campañas publicitarias en el Mundial Brasil 2014 tienen, estos días, muchas cuentas que hacer. Aunque no tenemos datos oficiales del desembolso previsto de las empresas españolas, El Financiero ha publicado que se prevé que, a nivel mundial, las empresas gasten alrededor de 68.500 millones de dólares en televisión y 56 mil millones de dólares en internet.[1]

Además del desastre económico y del breve período de tiempo que les ha durado su exhibición al público, existe otro detonante todavía más perjudicial para los anunciantes: la imagen de marca generada. Así, empresas como Cruzcampo, Iberdrola, Movistar, Gillette, Cepsa o Pelayo, deberán revisar sus estrategias publicitarias para los próximos tiempos.

Cruzcampo mundial la roja

Por otro lado, lo vivido en este Mundial ha dejado clara la importancia de contar con una agencia de medios ágil, capaz de reaccionar a tiempo ante cualquier cambio. Las agencias han tenido que hacer y deshacer, planificar campañas para luego desplanificarlas, una tarea muy compleja teniendo en cuenta la magnitud de las inversiones. El escenario surgido nada tiene que ver con el planteado inicialmente; en publicidad, como en tantas disciplinas, subestimar a un rival puede tener graves consecuencias. Este problema no es sólo un problema de anunciantes sino que también ha afectado a los medios de comunicación, muy especialmente a Mediaset, a las agencias de publicidad, de medios, de relaciones públicas, de eventos, etc. que de algún modo se habían contagiado de la fiebre futbolística.[2]

Antes de iniciarse el evento deportivo más visto del planeta, anunciantes, medios y agencias pensaban que “iban a hacer su agosto”. Hoy, a poco mas de diez días de su inicio, se han quedado “de Rodríguez”.

En  Roldós siempre planificaremos tus campañas de forma eficiente y acorde con tus necesidades.